Luego de haber caminado
por todo el país empeñado en fortalecer la memoria histórica y ante el pedido
de muchos compatriotas del exterior y desde luego al interior, nuevamente
presentamos ante ustedes la reedición de dos obras monumentales, luego de haber
agotado 40.000 ejemplares y próximamente estarán a su disposición en el
Ministerio de Relaciones Exteriores:
La CIA contra América Latina: caso especial Ecuador;
que ofrece a la ciudadanía herramientas de análisis acerca de diferentes
sucesos de la historia, como los vividos con relación a la injerencia de la CIA
(Central Intelligence Agency) en los asuntos nacionales, lo cual da cuenta de la
ambición de individuos, compañías multinacionales, instituciones, organismos,
partidos políticos, medios de comunicación y gobiernos, que han establecido
situaciones de opresión, mentira, ingratitud, desconfianza, dominación. El
panorama que se expone en el libro que ahora presentamos nos pone en alerta
alrededor de maniobras ejecutadas por la CIA, elucubradas de manera sistemática
durante varias décadas en Ecuador y Latinoamérica, cuyo objeto siempre ha sido
contrario a los intereses de los pueblos y en favor de los grupos minoritarios
que no han escatimado en inventar cualquier medio para derrocar gobiernos
democráticos, perseguir a pensadores de avanzada e incluso encarcelar y
asesinar líderes que buscaron el bienestar social.
La obra que ahora
reeditamos, luego de que se agotara la primera edición, es una muestra de lo
que nunca deberá suceder; esto es, el espionaje, la traición a la patria, las
represalias a las decisiones soberanas de los diferentes países, los bloqueos
económicos, las amenazas, el hostigamiento armamentístico. Es, asimismo, una
advertencia sobre el peligro de la restauración conservadora que pretende
borrar con engaños las conquistas logradas. Los procesos progresistas que vive
Ecuador, marcados por la estabilidad democrática y la puesta en práctica de
políticas favorables a los grupos más desposeídos, sin duda marcan un derrotero
hacia la justicia económica, el cumplimiento de los derechos de la población y
en especial la consecución de la paz y la soberanía que el gobierno de la Revolución
Ciudadana se ha empeñado en construir, para darle sentido a la equidad en todos
los niveles, incluido aquel de las relaciones con los países hermanos de la
Patria Grande y del resto del mundo. Y La esclavitud de la América Latina;
la experiencia de José Peralta como ministro de Relaciones Exteriores de Alfaro
le permitió comprender claramente el carácter, funcionamiento y propósitos de
la política norteamericana en su tiempo. Para él no había dudas de que Estados
Unidos había impuesto sus protervos intereses en la región desde el siglo XIX,
al punto de controlar y someter a sus gobiernos y pueblos. De ahí el título de
su ensayo La esclavitud de la América Latina. Para el eminente autor,
dicha relación era la causa fundamental que impedía el desarrollo y ejercicio
de la soberanía, así como la prosperidad económica y la instauración de un
sistema democrático real.
Ante esta situación,
para Peralta la única salida encaminada a recuperar la independencia y la
soberanía de América Latina es la unidad de la región, inspirada en el
bolivarianismo unitario. Solo de esta manera se podrá hacer frente al monroísmo
y su hipócrita lema ‘América para los americanos’. Por fortuna, aunque el siglo
XX estuvo plagado de golpes de Estado, gobiernos y dictaduras neoliberales, el
siglo XXI nos encuentra con gobiernos progresistas y revolucionarios, que han
dado nacimiento a organismos integradores.
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P.D. Le invito a que escriba su
comentario en el recuadro de abajo, no importa si está a favor o en contra.
Ejerza su derecho a decir lo que piensa.
C. M.
Luis Fernando Carvajal Herrera.
Atte.
Siempre le he admirado al Sr. Jaime Galarza Zavala, como no consta en la página del senescyt con ningún título me atengo a esto, desconozco si el grado de Dr. es honoris causa. Sigo, me gusta su estilo, su prosa, y es estos días justamente estaba leyendo EL FESTIN DEL PETROLEO. Cuando el Sr. Galarza y todos los que hemos leido sus libros, nació ya habían muerto todos los ex presidentes norteamericanos a quienes se les endilga el cometimiento de irregularidades, no podemos vivir en el pasado echándole la culpa de nuestro subdesarrollo a los yanquis, basta por favor. En vista que el sr. Galarza, ocupa un cargo en la Casa de la Cultura Ecuatoriana, es decir, se ha convertido en burócrata y se afirma que la cancillería ecuatoriana va a editar sus libros es motivo más que suficiente para abstenerme de leerlo, creo que a su edad ya perdió su brió y lo único que necesita es apoyo económico, lo cual se lo está brindando el gobierno. Echarle la culta a la Central de Inteligencia Americana, a la restauracion consevadora, etc., en los actuales momentos es de lo más impertinentes. Los ecuatorianos queremos cuentas claras, queremos recuperar la justicia que se ha convertido en un mito, queremos que se archiven las enmiendas, que el actual presidente termine su periodo conforme lo dispone la Constitución y que otra persona cualquiera que sea tome las riendas del país, Nadie es indispensable en ninguna parte del mundo. A los ecuatorianos no se nos puede tratar de estúpidos. Dr. Máximo Campoverde Balcázar
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